lunes, 25 de marzo de 2024

Talavera, Meta y los publirreportajes

La Tribuna de Talavera/Toledo, 22 marzo 2024

Ayer otra vez, esta vez en El País, el antes conocido como Diario independiente de la mañana, al menos cuando lo compraba. Desde que se anunció que Meta vendría a Talavera no es la primera vez que se tira a dar, a derribar el proyecto. No sé si es por la ubicación, Castilla-La Mancha, con su presidente Emiliano García-Page comprometido desde el primer día y su gobierno declarándolo Proyecto de Singular Interés; porque es en Talavera y debemos seguir por siempre en el pozo purgando alguna oscura culpa; o porque a alguien le cae mal Meta o Zuckerberg.

Se atacó por el flanco del agua. Y ahora también por los perjuicios que ocasionará. Que si no creará empleo, que en Países Bajos lo han rechazado... Ahora somos esa «localidad manchega» con un 25 % de paro resignada a lo que le venga, con un Ayuntamiento que no habla, y que tenemos que aprender de Zeewolde, Países Bajos, donde la gente sí que pelea por lo suyo... que de momento no nos ponemos en pie de guerra…

Si es por agua, ya escribí por aquí hace meses que no hay ni un solo problema. Con las dotaciones ordinarias del Alberche, tenemos de sobra. También con los 15 hectómetros cúbicos de regadío que nos ha quitado el actual Plan de cuenca del Tajo para regalárselos a las reservas de Madrid. O con lo que se va por el trasvase, porque recuerdo que la cuenca del río Tajo es excedentaria por ley, y cualquier uso en su demarcación (cualquier uso, repito, cualquier uso) está por encima del Tajo-Segura, un trasvase que solo este año se va a llevar cerca de 350 hectómetros cúbicos -para los exagerados de las cifras, son trescientos cincuenta mil millones de litros– «excedentarios» que darían para enfriar las instalaciones de Meta 500 años. Vamos, que con lo que se está yendo por el trasvase estos días en 8 horas, se cubre la demanda anual de Meta. ¿Qué problema hay? Y si es por electricidad, ahí al lado tenemos todas las fértiles vegas del Tajo inundadas con cerca de cinco kilómetros cúbicos, un fabuloso negocio produciendo energía hidroeléctrica, los dos reactores de Almaraz –a los que últimamente hay que parar, uno hace un par de fines de semana, porque nos «sobra» producción–, y nos están alicatando el territorio sin piedad con placas solares… ¿Qué problema hay?

No tengo nada a favor de Meta. Pero tampoco en contra. Si se quisiera colocar un poco más arriba, en medio del Baldío de Velada, o un poco más abajo, en los llanos de Calera, sería el primero que lo denunciaría. Conozco Torrehierro, todos lo que somos de Talavera o alrededores lo conocemos. Si viene bien; si no, que sigan criando las cogujadas. En Talavera hubo un mercado de Ganados ocho siglos o más porque estábamos en medio de cordeles, cañadas y las autopistas de aquellos tiempos. Ahora el cable de los datos pasa por aquí. A lo mejor tenemos que pedir perdón, dejar que el agua se vaya a crear riqueza donde siempre, y los kilovatios que pone el Tajo sigan rindiendo beneficio en Bilbao. Las dos Españas de siempre, pero las de verdad. No sé qué intereses están detrás de estos publirreportajes. Me hubiera gustado que el mismo foco se hubiera puesto hace unos años en esta ciudad, la de mayor paro de España y buena parte de Europa, incomprensible estando a hora y cuarto del centro de Madrid; con el desguace de sus
Share/Bookmark Leer más...

jueves, 21 de marzo de 2024

Demagogia transparente

La Tribuna de Talavera/Toledo, 16 febrero 2024

España es un país complicado. Te coges un mapa de relieve y te explica muchas cosas. No sé ahora, pero antes en la EGB te enseñaban esas cosas. Dónde nacían los ríos, que iban de las montañas al mar, que en el centro había una meseta dividida por el Sistema Central, y que en la periferia la tierra caía abruptamente al mar, menos en las vegas de los grandes ríos, que lo hacía de una manera más suave. Había mapas de colores que iban desde el marrón oscuro y gris de las cumbres y zonas altas, hasta un degradado de marrones y naranjas que se iban transformando en verdes claros según se bajaba de cota.

Recuerdo el maravilloso mapa en relieve de la Caja de Toledo, indispensable para entender esta región novísima. A ver si me hago con uno. Los mapas explican cómo funciona un país, sobre todos los de relieve. En España nos ha dado por concentrarnos en Madrid y en la periferia, en especial la Mediterránea. Y en este país la lluvia mayormente viene del oeste, y los grandes ríos van hacia el oeste, salvo el Ebro. Eso no debe saberlo el presidente valenciano, Carlos Mazón, que se queja amargamente de que el trasvase lleva más agua a Portugal que a los territorios alicantinos y murcianos.

No sé quién se lo habrá contado, pero el trasvase va sólo para un lado, contra natura, y se lleva la cabecera del Tajo. Lo que queda de río, mínima expresión, es ya Jarama en Toledo, y sólo se rehace cuando llegan el Tiétar y el Alagón y el granito de Extremadura. Como el Guadiana se rehace en Alqueva, ya más allá de la raya; y el Duero en los Arribes. Es la geografía. Pero siguiendo la filosofía del presidente valenciano, podríamos desde esta Castilla-la Mancha donante universal de agua, hacer uso de nuestros ríos, que nacen y pasan por aquí. Por ejemplo, toda el agua almacenada en Alarcón y Contreras, en el Júcar y en el Cabriel, enviarla a regar en Cuenca, Albacete y Ciudad Real, a la vez que recargamos acuíferos en la Mancha oriental y occidental. ¿Para qué vamos a dejar que llegue a la Comunidad Valenciana, riegue su huerta, abastezca a varios millones de compatriotas, se trasvase a toda la demarcación hidrográfica, incluido el Vinalopó, y surta de caudal ecológico a la Albufera? ¿Por qué no llenamos y cerramos El Cenajo, La Fuensanta, el Talave y Camarillas en el Segura y el Mundo, y usamos nosotros su agua y dejamos un chorrillo para Murcia y Alicante? Ni siquiera caudal ecológico. ¿Para qué? ¿Por qué no cerramos el trasvase y usamos nosotros el agua del Tajo y montamos entre Aranjuez y Talavera la mayor huerta de Europa al lado del mayor mercado del sur del continente?

Cuando se parió este invento de Castilla-La Mancha las cartas del agua estaban repartidas, y no nos dieron ni una buena. Si, en los planteamientos de Mazón, usáramos los ríos que por aquí nos pasan, quizá la renta per cápita fuera otra. Quizá no estaríamos desde siempre en el furgón de cola autonómico, con la menor densidad de población de todas. A algunos les han llevado el agua. A otros nos demonizan por usarla. Somos de segunda. La demagogia es transparente. Tanto como las aguas limpias que paren nuestras sierras para que, sin tocar aquí -faltaría más- se usen y creen riqueza en la periferia de la meseta que nos sostiene. Porque todos somos españoles. Pero parece que algunos más y con más derechos.
Share/Bookmark Leer más...

Gaza

La Tribuna de Talavera/Toledo, 1 marzo 2024

Recuerdo aquel poema de Anna Ajmatova. En la cárcel de Leningrado, haciendo cola mes tras mes. Tiempos de Stalin, Yezhov, la NKVD, el Gran Terror... Una mujer la reconoce. Y otra, al enterarse de que es escritora, le pregunta, en susurros, si podría describir, quizá algún día, «esto». Ella le dice que sí, «Y entonces algo como una sonrisa asomó a lo que había sido su rostro». Siempre, al leer lo ocurrido en el nazismo, o en el estalinismo, me he preguntado por qué se dejó hacer desde dentro. Cómo se permitió la escala de barbarie, si es posible expresarlo así. Y cómo se construyen los mecanismos de represión tanto propios como internos. Más que el por qué, el cómo. El silencio, la sumisión, el miedo, el poder, la aquiescencia... No es escusa que quizá, antes sólo se conociese en las proximidades, y a las lejanías no llegasen nada más que ecos dudosos.

En Gaza asistimos a un genocidio en directo, con todo el desprecio posible hacia la vida. Sí, hemos visto destruir Afganistán, Yugoslavia, Libia, Irak, Siria... Y Ucrania es un moridero retransmitido también por las redes sociales. Pero lo de Gaza supera todos los límites. ¿Hay límites, acaso? En unos años nos preguntaremos -nos preguntarán- qué hicimos en aquel momento. Hoy. Hacia dónde miramos, qué nos poníamos delante de los ojos, en los oídos, para no ver ni escuchar. Para no sentir. Para dejar hacer. ¿Qué fue? ¿Indolencia? ¿Miedo? ¿Abulia? ¿Desprecio sin más?

Me viene a la cabeza, mientras escribo, Vida y destino, de Vasili Grossman. La condición humana sobreviviendo a duras penas allí donde no hay futuro. Pero ahí está. Gaza es un costurón en el humanismo de este planeta. Dejamos hacer. Ninguna mujer de Gaza podrá pedirnos que escribamos lo que está sucediendo para que alguien sepa algún día lo que ocurrió, como aquella mujer ya sin rostro a Ajmátova en Leningrado. Porque lo estamos viendo todos minuto a minuto. Quizá antes, en medio de la barbarie, quedaba la esperanza de que algún día se supiese lo que había ocurrido, que alguien relatase el sufrimiento y el sinsentido. Que sirviera para algo. Quizá para no repetirlo, para ser mejores. Pero ahora lo tenemos delante, cada día. Y no reaccionamos. Quizá lo último, la esperanza en que la verdad aflore, ya tampoco sirve. ¿Qué queda entonces?
Share/Bookmark Leer más...

O trasvase o Tajo

La Tribuna de Talavera/Toledo, 8 marzo 2024

O hay trasvase o hay Tajo. Da hasta vergüenza escribirlo a estas alturas. Ni para beber ni para regar. En la cuenca del Segura, si se cumple la Ley de Aguas, no es necesaria el agua del Tajo para beber. Sobra. No existen excedentes en la cabecera del Tajo. No existen. ¿Lo escribo mil veces? Y las reglas de explotación, las de antes, las actuales, y las que vengan, se dictan al interés y bajo la tutela de los intereses trasvasistas, en Madrid y levante, manteniendo artificialmente bajos los embalses, y soltando cada vez menos agua hacia el propio río. El Tajo no importa, tanto es así que ni siquiera tendrá caudales ecológicos hasta 2027, y estos serán ínfimos, muy alejados de los que técnicamente ya aprobó la propia Confederación Hidrográfica del Tajo en el año 2010; y estos caudales irrisorios para un río de la enjundia del Tajo, fijados a regañadientes a resultas de cinco sentencias del Tribunal Supremo, gracias a un esfuerzo técnico y jurídico pagado a escote por ciudadanos y ciudadanas de las riberas del Tajo.

El sainete que se escenifica con la comisión que teóricamente discute los caudales, reservas en Entrepeñas y Buendía y esas cosas, vuelve a retratar un tiempo político tan fatuo como absurdo. No podemos trocear al niño, salomónicamente, en dos o tres pedazos, y repartir el botín. Y creo que Castilla-La Mancha no está en las comisiones del Mar Menor o de Doñana. O sí, quién sabe. Que Murcia y Valencia mantengan su posición de prevalencia sobre la gestión del Tajo, el elemento singular que define nuestro territorio, nuestro mayor elemento cultural y patrimonial, lo sigue diciendo todo. Máxime contando con un marco jurídico que emana tanto de la Directiva Marco del Agua, como de la propia legislación española; y con una encomienda explícita al gobierno central por tratarse de una demarcación hidrográfica de ámbito tanto nacional como internacional. El Tajo es el único río de la Unión Europea que tiene limitada por ley la salida de agua hacia su propio cauce en Bolarque. Tanto es así que ni siquiera se llegan a los umbrales límite, porque se 'ahorra' agua cada mes, con cada vez menos usos consuntivos en el propio río; y limitando los caudales circulantes; ahorros que se quedan para trasvasar. Es tan aberrante el modelo de gestión del Tajo, que la cabecera, a efectos de planificación, sigue amputada del propio río. Es la cabecera del trasvase, como indica el Plan especial de sequía, no del Tajo, que no se nos olvide. Y el Plan de cuenca no la toca, porque depende de una ley, la del trasvase… Y así todo el inmenso y delirante aparataje jurídico que tiene constreñido en una camisa de fuerzas al río. El Tajo es un río muerto y estrangulado. Incluso en 2027 lo seguirá siendo. ¿Responsables? Elija.

¿Qué se puede hacer? Poner orden en la gestión del Tajo. Que no siga siendo una hidrocolonia, gobierne quien gobierne en Madrid. Que aquí nos pongamos las pilas de una vez por todas, en Castilla-La Mancha, Toledo, Talavera de la Reina… al menos. Madrid va a lo suyo. Que saquemos de una vez del cajón los planes de gestión, con sus caudales asociados reales y temporales, de los espacios de la Red Natura 2000 asociados al Tajo en su recorrido por Castilla-La Mancha … Y que tengamos claro de una vez por todas que ya está bien, que no sirven más componendas, que hemos perdido muchos años anteponiendo otros intereses a los del Tajo, dejando hacer, utilizándolo como moneda de cambio… Que llevamos 45 años de trasvase y con un río desahuciado. O Tajo o trasvase. No hay término medio.
Share/Bookmark Leer más...

miércoles, 20 de marzo de 2024

El Calderón

La Tribuna de Talavera/Toledo, 15 marzo 2024

El Calderón es el cine. Uno de los cines que tuvo Talavera. Ahora duerme tapiado en la plaza de los Descalzos, junto al mudéjar de Santiago y al silencio empedrado de la calle de San Sebastián. Si usted indaga verá que existe un proyecto para derribarlo, convertirlo en una plaza, y al lado levantar un bloque de pisos, uno más de los que pespuntan el casco antiguo de la ciudad. Este edificio ya no brotaría en los especulativos y piqueteros años setenta del pasado siglo, sino bien avanzado el XXI, lo que viene a demostrar lo poco que aprende esta ciudad. O que siguen mandando los de siempre, gobierne quien gobierne en la Plaza del Pan. Si usted indaga un poco más puede encontrar la ficha de este edificio en el Inventario de bienes inmuebles que sirvió de urdimbre a la declaración del Conjunto histórico de Talavera de la Reina un lustro atrás. El Convento de Santa Ana de los Descalzos de San Francisco, su historia, avatares, la primera proyección cinematográfica en las postrimerías del siglo XIX.

El edificio y su entorno quedaron y quedan dentro del perímetro protegido del Conjunto. Los restos del convento con protección estructural. Pero eso creo que importa poco. Tanto como que se haya dado el visto bueno a otro proyecto de pisos con aparcamiento subterráneo junto a la colegial, con las retroexcavadoras hurgando de nuevo en los niveles romanos y liquidando todo lo que queda por encima. Y es que el tiempo no pasa para Talavera de la Reina. Todo sigue siendo posible.

Como ciudad nos deberíamos plantear si queremos conservar nuestro patrimonio más allá de los papeles. De verdad. Si queremos mantener algún anclaje a lo que fuimos; y referencias para un futuro posible. O si seguimos dejar haciendo. Debemos tener claro, por ejemplo, si queremos ser una ciudad de futuro, con Meta y lo que venga asociado; o mejor queremos plantas de gestión de purines a gran escala. Saber lo que se quiere, algo de visión.

El Calderón es historia. Pero de la de verdad. De la grande y de la de cada uno. Quizá un día a las imágenes en blanco y negro del desmontaje de la iglesia de San Pedro, de las puertas de la muralla, de la cárcel de la Santa Hermandad… sumemos en color las del derribo del Calderón. Espero y deseo que no. Sería otro bajonazo a la ciudad, a su/nuestra memoria. Otro costurón a sumar a tantos de los que hoy nos arrepentimos.
Share/Bookmark Leer más...

viernes, 17 de marzo de 2017

Apoptosis talaverana

La Tribuna de Toledo, 17 marzo 2017

Fuente: Facebook, Talavera nuestra ciudad

Se les ha ido la mano con Talavera. Si usted lee esto desde Toledo o desde la zona oriental de la provincia, quizá crea que ya estamos con lo siempre. Que ya vale y tal. Que nos dejemos de lloreras y del cuento de la marginación y mandangas varias. Pero no. Se les ha ido la mano con Talavera, al Estado, la Junta, la Diputación... Estamos tardando en manejar el concepto también manido por otros territorios de deuda histórica con Talavera. No es ombliguismo. Es simple análisis. Se les fue la mano con Talavera, antes, pero también ahora andan con el paso cambiado, tanto en el Estado comandado por Rajoy, como en la Junta y en la Diputación del Psoe de Page.

Y claro, el vaso rebosó hace tiempo, con un cuarenta y tantos de paro, con el colapso social que hace que dos o tres generaciones se hayan marchado o estén en ello, y con la pérdida de un capital humano irrecuperable. El vaso rebosó cuando se convirtió a Talavera en un gueto, cuando se la sacó del mapa del transporte, por ejemplo, a finales de la pasada década. Cuando se la secuestró el Tajo y el Alberche. Cuando se rieron de los regantes del Canal Bajo postergando sine die la modernización. Cuando se decidió que las periferias no manchegas de la región quedaran como costra, extrarradio, y ahí claro quedó Talavera y su tierra. Toda. Tan vacía y dejada hoy que duele recorrerla y sentirla.

Evidentemente, todo eso no fue sólo por la “inquina” de Toledo y Madrid, de los Bono, Barreda, Cospedal y Page. Fue posible por una larga lista de abajo firmantes, responsables y que asintieron, callaron, y permitieron. Ahí están las hemerotecas, las promesas, las mentiras, los dobles juegos. Y ahí estamos los talaveranos, silentes, votantes, confiados una y otra vez, desesperados ya, engañados mil veces, insultados con cada anuncio, con cada plan estratégico de cartón piedra, cada estudio, anteproyecto. Con cada vacío publicitado y lanzado a la cara ya como desprecio, y que sólo vienen a recordarnos la brecha entre la Talavera real y la que pudo y debió haber sido.

Los viejos moldes no sirven. Quienes se han turnado en el poder y han venido permitiendo desde la alcaldía la amputación de las posibilidades de la ciudad, no pueden pedir más tiempo, más oportunidades, más recorrido para más promesas y más décadas vacías. El gobierno de Rajoy no contempla nada para Talavera en los presupuestos del Estado, ni para electrificación y desdoblar la vía, ni para el plan de riberas, ni para Torrehierro, ni para modernizar regadíos... Page troceó la ITI prometida para Talavera en seis pedazos, hace más de un año de ese anuncio del plan especial anunciado en la vaquería de Talavera la Nueva, y ya debe quedar poco para que nos anuncie otro igual de “generoso”. Sería un error gastar las esperanzas de la gente en un ajedrez de intereses ajenos a los de la ciudad, buscando equilibrios a medio plazo para aquí o para Toledo, pero en ningún caso anteponiendo el verdadero interés general.

No estamos en el mapa. Nos han sacado y lo hemos permitido. Nos han programado para languidecer, desaparecer, pintar poco o nada. Han/hemos conseguido/tolerado aquí décadas de gestores políticos al mando sumisos y colaboracionistas. No sólo lo digo yo, también los hechos y las consecuencias. ¿Cómo nos metemos de nuevo? Esa es una de las preguntas. Y la otra, saber si vamos a continuar permitiendo y acatando la liquidación programada de Talavera. Está en nuestras manos decidir.
Share/Bookmark Leer más...

viernes, 10 de marzo de 2017

11-14

La Tribuna de Toledo, 10 marzo 2017


Ya están aquí los vencejos cruzando el cielo amurallado de albarranas de Talavera. Y en nada llegará mayo y se cumplirán dos años de las elecciones municipales de 2015, el paso del ecuador de la legislatura/mandato local. A medio camino es el momento de echar un vistazo, atrás y sobre todo hacia delante, en especial en Talavera de la Reina, donde las cosas se olvidan demasiado pronto, y las telas de araña, derrotismos y marginaciones históricas varias marcan la agenda, más allá de la capacidad de gestionar, traer proyectos ilusionantes y convertibles en puestos de trabajo y riqueza.

Las elecciones de mayo de 2015 no dieron al PP una mayoría absoluta. Sólo 11 concejales de los 25. Es decir: hay posibilidad de una mayoría fuera del PP y de la no política de piloto automático hacia Talavera seguida a pies juntillas hasta el momento. Y es que en otros lugares de España (de la provincia y de la propia Castilla-La Mancha), otros modelos de gobiernos nuevos sí están dando resultados para sus ciudades. Los proyectos, las iniciativas, los resultados no llegan solos. Hay que pensarlos, trabajarlos y pelearlos. Pero por aquí no hubo tiempo a otro modelo de gestión: Ciudadanos a las primeras de cambio se acomodó/empotró adosándose al PP con sus dos concejales, y se acabó lo que se daba. A sestear. Tanto la acción de gobierno como la propia ciudad. Y en esas estamos.

De nada sirve trabajar, presentar mociones, iniciativas, estudiar y plantear alternativas, si al final todo acaba en los cajones, y ves cómo las posibilidades se diluyen, se van a otros lugares, y aquí seguimos en la política de anteproyecto de propuesta de estudios previos de análisis preliminares de milongas varias que siempre acaban en humo. Y es que la situación de Talavera no es casual. Es fruto de una acción de gobierno de décadas perfectamente visible ahora mismo. Fotografías, decálogos, papeles y pocos hechos. La política es la capacidad de hacer realidad lo planificado. De dar respuestas a tu comunidad. De liderar y dirigir. Entender la política como un equilibrio de intereses al servicio del partido, arroja el resultado de la Talavera actual. En política cuentan los resultados, y lograr cifras en los presupuestos tanto del Estado como de la Junta. No lamentaciones, declaraciones y fotos huecas como la de ayer de tres de los cuatro portavoces y alcalde, escenificando perfectamente el paradigma de (casi) todos con lo de siempre.

A medio mandato la visión de la gestión de gobierno municipal suspende. Pero no olvidemos que 14 son más que 11, aunque cada uno deberá aguantar su responsabilidad, por activa o por pasiva. Nada es definitivo, o no debería serlo, más cuando queda claro que la situación es inestable y errática. Podemos desviar la atención a movimientos “apolíticos” de teórico nuevo cuño que en ningún caso cuestionan el pacto de gobierno municipal, o a manifestaciones urgentes de parte, que acuden a actuar como vacuna o antídoto, o el “todos a una” que sólo vienen a apuntalar la situación actual, es decir, a los mismos de siempre, a los responsables. Pero el problema es otro. Y el tiempo y las oportunidades siguen pasando. Y éste es el resto.
Share/Bookmark Leer más...